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El triunfo de la razón no tiene que ser derrota del gobierno: Intelectuales

Más de 40 intelectuales y artistas afirman convencidos que el conflicto sólo podrá resolverse mediante el uso de la razón y proponen para normalizar la actividad educativa lo siguiente:

  1. Retirar al ejército de la UNAM y el IPN.
  2. Liberar a los detenidos desde el 26 de julio, especialmente a los ya formalmente presos, culpables sólo de solidarizarse con el Movimiento o criticar al gobierno.
  3. Cesar la persecución de estudiantes y profesores contra los que hay orden de aprehensión.
  4. Poner fin a las detenciones arbitrarias, la violencia, el terrorismo y la prohibición de reuniones públicas.
  5. Iniciar el diálogo público sobre el Pliego Petitorio.
  6. Lograr cooperación entre maestros, estudiantes y autoridades escolares para reanudar clases e iniciar una reforma radical de la educación.

Tales condiciones no podrán cumplirse fácilmente porque serían un triunfo de los estudiantes, pero añaden “esa victoria no tendría que ser derrota para el gobierno, a menos que éste considere sus intereses antagónicos e irreconciliables con los de cualquier movimiento genuinamente popular” y concluyen: ni antes ni después de que el ejército tomara CU el Movimiento ha hecho peligrar el orden ni la estabilidad; la causa estudiantil es legítima, dirigida sólo por estudiantes, ha recibido apoyo y solidaridad porque sus banderas son viejas aspiraciones y justas demandas del pueblo”.

Las demandas del CNH, en otro desplegado, coinciden con las planteadas por los intelectuales; reitera que el Movimiento sólo terminará cuando se solucione el pliego petitorio y aclara que nadie puede decidir si una huelga continúa o se levanta, pues eso corresponde a las asambleas de cada escuela.

La Procuraduría del DF informa que continúan las consignaciones de los detenidos últimamente, y la de la República puso a disposición del juez 1o. de lo penal a Luis Tomás Cervantes Cabeza de Vaca. Señala que este estudiante de Chapingo es miembro de la Juventud Comunista y de la CNED, y está acusado de incitación a la rebelión, asociación delictuosa, ataques a las vías de comunicación, daño en propiedad ajena, robo y despojo.

Ante testigos, todos los consignados negaron los cargos.

 

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